domingo, 31 de marzo de 2013

Chiste

- Mama, mama, por que estamos empujando el coche hacia este barranco?
- Calla, que vas a despertar a tu padre.

domingo, 24 de marzo de 2013

Fragmento de El Cuenco de los Vientos

Título original: A Crown of Swords
© 1996 by Robert Jordan

«No podemos tener salud ni nada bueno puede crecer,
pues la tierra es una con el Dragón Renacido
y él es uno con la tierra. Alma de fuego, corazón de piedra,
altivo conquista y obliga a los altivos a doblegarse.
Conmina a las montañas a que se arrodillen,
a los mares a que le abran paso,
y al propio firmamento a que le rinda pleitesía.
Ojalá el corazón de piedra recuerde el llanto
y el alma de fuego, el amor.»

Fragmento de la controvertida traducción
de Las Profecías del Dragón
por la poetisa Kyera Termendal, de Shiota,
supuestamente publicada entre el 700 y el 800 AL

PRÓLOGO

Rayos

Desde el alto ventanal en arco, a unos ciento veinte metros del suelo y no mucho más abajo del ápice de la Torre Blanca, Elaida alcanzaba a ver las onduladas llanuras y bosques que, kilómetros más allá de Tar Valon, lindaban con el anchuroso río Erinin, el cual discurría desde el noroeste antes de bifurcarse alrededor de las blancas murallas de la urbe insular. Al nivel del suelo, las largas sombras matinales debían de estar proyectando oscuros perfiles sobre la ciudad, pero desde esa ventajosa posición todo parecía claro y luminoso. Ni siquiera las legendarias Torres Infinitas de Cairhien rivalizaban realmente con la Torre Blanca. Desde luego, ninguna de las torres menores de Tar Valon lo hacía, a pesar de lo mucho que la gente se hiciera lenguas de ellas y de sus gráciles pasarelas arqueadas.

A esa altura una brisa casi constante aliviaba el calor antinatural que azotaba al mundo. Pasada la Fiesta de las Luces, una profunda capa de nieve debería haber cubierto el suelo, pero el tiempo parecía el propio de un tórrido verano en plena canícula. Otra señal, si es que hacían falta más, de que la Última Batalla estaba próxima y de que la mano del Oscuro tocaba el mundo. Ni que decir tiene que Elaida no permitía que el calor la afectase ni cuando descendía a los pisos bajos. La brisa no era la razón de que hubiese hecho trasladar sus aposentos allí arriba, a esas sencillas habitaciones, a pesar del inconveniente que representaban tantas escaleras.

Las baldosas lisas, de un tono rojizo, y las paredes de blanco mármol adornadas por unos pocos tapices no tenían comparación con la grandiosidad del estudio y los aposentos de la Amyrlin situados mucho más abajo. Aún utilizaba esas estancias de vez en cuando —en las mentes de algunas personas ese fausto se asociaba con el poder de la Sede Amyrlin— pero residía arriba, y también trabajaba allí las más de las veces. Por la vista. Pero no de la ciudad ni del río ni de los bosques, sino de lo que empezaba a cobrar forma en los terrenos de la Torre.

lunes, 4 de marzo de 2013

Micro Reto del Mes de Marzo


Nuestros compañeros del Club de Lectura Brigantium, de la Asociación Palaestra ha empezado una nueva actividad; los Micro Retos (seguro que a alguno tiene problemas con la pronunciación) que serán convocados cada mes. Son mini concursos de relatos, que en esta ocasión está regido por las siguientes

BASES: 

MICRO RETO MARZO 2013

1- Podrán participar todos los autores, sea cual sea su nacionalidad, con microrrelatos en Gallego o Castellano. No hay límite en el número de relatos a presentar por participante.

2- En el relato aparecerá, aunque sea de manera tangencial, alguno de los siguientes temas, del que el 1 de marzo se celebró un aniversario. El autor es libre de emplear estos temas de la manera que considere oportuno y desde la óptica de cualquier género literario:

A) La muerte de Rosendo de Celanova, santo, abad, obispo y conde gallego, acontecida en el 977.

B) El nacimiento de Alfonso Raimundez, hijo de Raimundo de Borgoña y de Doña Urraca, acontecido en 1105 en Caldas de Reis. Siendo niño fue proclamado Rey de Galicia por Gelmirez en la Catedral de Santiago.

C) En el 1493 la carabela Pinta, mandada por Martín Alonso Pinzón y pilotada por Sarmiento, arriba a Baiona. Será la primera de las naves en regresar y desde la villa pontevedresa se propagará la noticia del éxito de la misión de encontrar un nuevo camino a las Indias.

3- Los microrrelatos tendrán una extensión de ENTRE 1 y 500 PALABRAS, sin incluir el título. Las obras vendrán redactadas en formato txt, odt, word, rtf o pdf.

4- Los microrrelatos se enviarán por correo electrónico la: asociacion@palaestra.net, en fichero adjunto. En el cuerpo del mensaje deben aparecer los datos para contactar con el/la autor/a. Los relatos pueden ser presentados bajo seudónimo.

5- El plazo de admisión comienza el 1 de marzo de 2013 y finalizará a las 23:59 horas del 31 de marzo de 2013.

6- Los relatos serán sometidos a una votación de los lectores durante el mes de abril de la manera que se determine desde Palaestra.

7- El fallo será inapelable y se publicitará seguidamente a través de esta web, así como por el correo desde el que se remitió el relato.

8- Las obras presentadas quedarán en poder de la Sociedad Cultural y Deportiva Palaestra, que se reserva el derecho de su publicación, exposición y difusión, a través de su sitio web o de otros colaboradores, citando siempre las referencias del autor.

9- El relatos ganador será publicado en gallego en la Colección Libros de Bolsillo de Asencudega. El ganador recibirá un pequeño regalo de la entidad y varios ejemplares del libro donde se incluya su relato. La publicación se realizará al finalizar los concursos de 2013.

10- La presentación la este concurso implica la aceptación de estas bases. Los casos no previstos serán resueltos por la organización.

sábado, 2 de marzo de 2013

Inicio de AQUÍ YACE EL WUB, de Philip K. Dick

Hoy se cumple el 31º Aniversario del fallecimiento de Philip K. Dick, cuando solo contaba con 53 años de edad (ver biografía en wikipedia). Para los interesados en la ciencia ficción uno de los grandes y para el público en general, recordado fundamentalmente por la película Blade Runner (dirigida por Ridley Scott en  1982, año de la muerte del escritor que no llegó a verla estrenada) basada en la novela ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?,  escrita en 1968.

Publicamos el inicio de Aquí yace el wub.


Faltaba poco para terminar de cargar. El Optus, de pie, con los brazos cruzados, fruncía el ceño. El capitán Franco bajó despacio por la pasarela y sonrió.
- ¿Qué ocurre? - le preguntó -. Te pagan por esto.
El Optus no dijo nada. Recogió sus túnicas y dio media vuelta. El capitán pisó el borde de la túnica.
- Espera un momento, no te vayas; aún no he terminado.
- ¿De veras? - El Optus se giró con dignidad -. Vuelvo a la aldea. - Contempló los animales y los pájaros que eran conducidos hacia la nave -. He de organizar nuevas cacerías.
Franco encendió un cigarrillo.
- ¿Por qué no? A vosotros os basta con salir a campo abierto y seguir pistas. Pero cuando estemos a mitad de camino entre Marte y la Tierra...
El Optus se marchó sin contestar. Franco se reunió con el primer piloto al pie de la pasarela.
- ¿Cómo va todo? - Consultó el reloj -. Hemos hecho un buen negocio.
El piloto le miró con cara de pocos amigos.
- ¿Cómo explica eso?
- ¿Qué le pasa? Los necesitamos más que ellos.
- Nos veremos después, capitán.
El piloto subió por la pasarela, y se abrió paso entre las aves zancudas marcianas. Franco le vio desaparecer en el interior de la nave. Iba a seguirle los pasos hacia la portilla cuando lo vio.
- ¡Dios mío!
Se quedó mirando con las manos en las caderas. Peterson venía por el sendero, con la cara congestionada, arrastrándolo con una cuerda.
- Lo siento, capitán - dijo, manteniendo la cuerda tensa.
Franco avanzó hacia él.
- ¿Qué es eso?
El wub desplomó su enorme cuerpo lentamente. Se sentó con los ojos entornados. Algunas moscas zumbaban sobre su flanco y las espantó con la cola. Se hizo el silencio.
- Es un wub - explicó Peterson -. Se lo compré a un nativo por cincuenta centavos. Dijo que era un animal muy raro. Muy respetado.
- ¿Esto? - Franco aguijoneó el inmenso flanco del wub -. ¡Si es un cerdo! ¡Un inmundo cerdo grande!
- Sí, señor, es un cerdo. Los nativos lo llaman wub.
...