sábado, 12 de enero de 2019

Inicio de EL PADRE COMPLETO

EL PADRE COMPLETO
David R. Bunch

La vio, muy lejos en los campos de plástico brillantes como hielo, una silueta saltarina acercándose con pasitos cortos para mostrarle las manos de metalnuevo. 
Y en el interior de las tiras de carne sintió que una lágrima de amor intentaba aflorar, aunque en vano, pues tenía globos oculares de metalnuevo.
- ¡Mi pequeña! ¡Creciendo! - dijo.
- Como eres mi padre - dijo ella -, y es mi primera vez, mamá dijo que debía venir a mostrarte.
La niña tenía cuatro y medio. El la miró. Cuatro y medio.
- ¡Creciendo! - dijo -. ¡Mi última niñita!
...

No hay comentarios:

Publicar un comentario